EL JARDÍN DEL EDÉN


El Edén es, según el relato bíblico del libro del Génesis, el lugar donde habría puesto Dios al hombre después de haberlo creado a partir del polvo de la tierra.

Génesis 2:8: Y Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso ahí al hombre que había formado.

Génesis 2:15: Tomó, pues, Dios al hombre, y lo puso en el huerto del Edén, para que lo labrara y lo guardase.


Etimología de la palabra Edén

La palabra Edén suele ser utilizada como sinónimo de Paraíso (usado en la Biblia Septuaginta para aludir al Jardín del Edén). Sin embargo, la palabra "Paraíso" originalmente se refiere a un bello jardín extenso; mientras que "Edén", es una palabra de origén acadio (Mesopotamia), un pueblo de estirpe semita, cuyo significado se refiere a un lugar que es puro y natural. Así, Edén se refiere más bien a una región geográfica, mientras que el Paraíso se refiere a un lugar más específico (un huerto o jardín situado en la parte oriental de dicha región).

Descripción e historia

En la Biblia se indica que el Edén es un huerto o jardín que habría existido (al oriente), indicando su existencia en una región que se hallaría en el Cercano Oriente. 

Igualmente se dice que de él salía un río que se dividía en cuatro, llamados: río Pisón; el río Gihón (Rio Nilo; que habría rodeado toda la tierra de Cus (Etiopía); el río Hidekel (río Tigris); que iría al oriente de Asiria; y el río Éufrates.

En el libro Génesis en su capítulo primero, versículos 29 y 30 de describe la dieta vegetariana del paraíso original:

1:29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado (a Adán y Eva) toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. 1:30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así.

También en Génesis 9:3 se dice que se puede comer todo lo que se mueva y tenga vida, al igual que las verduras, que todo podemos comer.

En el jardín del edén Dios habría colocado dos árboles especiales, llamados el árbol de la ciencia del bien y del mal y el árbol de la vida; y, además, en este huerto, Dios habría colocado a Adán y Eva, para que vivieran.

En este lugar, Dios le otorgaría al hombre todo aquello que necesitase para tener gozo, placer y armonía, de este modo no le faltaría nada.

Aquí también Adán y Eva desobedecieron a Dios y comieron la fruta del Árbol de la ciencia del bien y del mal. Fueron maldecidos por su desobediencia: él trabajaría con el sudor de su frente, ella daría a luz con dolor y la culebra reptaría.

Luego fueron expulsados para evitar que el hombre alcanzara la vida eterna, pues ya tenía conocimiento del bien y mal al igual que la mujer provocó al hombre para que comiera del fruto del conocimiento. Génesis:

3:22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. 3:23 Y lo sacó Jehová del huerto del Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. 3:24 Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.

Para la protección del Edén y el camino hacia del árbol de la vida, La Biblia dice que Dios puso unos querubines (un tipo de ángel, el segundo de las nueve jerarquías angélicas. Se consideran los guardianes de la gloria de Dios. Su nombre significa "los próximos" o "los segundos" ) al oriente del huerto de Edén, y una espada ardiente (para impedir que el hombre accediera y también comiera el fruto del árbol de la Vida, el cual proporciona inmortalidad).

EDÉN 

1. Región en la que el Creador dispuso un parque o jardín como hogar original para la primera pareja humana. El que se diga que el jardín estaba “en Edén, hacia el este”, debe indicar que ocupaba solo una porción de la región llamada Edén. (Gé 2:8.) 

Sin embargo, después se le llama “el jardín de Edén” (Gé 2:15), y en textos posteriores se le denomina “Edén, el jardín de Dios” (Eze 28:13) y “el jardín de Jehová”. (Isa 51:3.) 

La Versión de los Setenta tradujo la palabra hebrea para “jardín” (gan) por la palabra griega pa‧rá‧dei‧sos. A este hecho se debe la asociación de la palabra española “paraíso” con el jardín de Edén. 

Génesis 2:15 dice que “Jehová Dios procedió a tomar al hombre y a establecerlo en el jardín de Edén”. Estas palabras no significan que la creación del hombre se efectuó fuera del jardín, sino simplemente que Dios ‘tomó’ al hombre en el sentido de que lo formó y creó de los elementos de la tierra, y luego lo dejó en el jardín en el que tendría que vivir. La asignación de trabajo del hombre era cultivar y cuidar del jardín. 

Entre los árboles y las plantas de Edén se hallaban todas aquellas especies que embellecían el paisaje, así como las que proveían alimento en amplia variedad. (Gé 2:9, 15.) Este hecho por sí solo indica que el jardín debió tener una extensión considerable. Existía una gran variedad de vida animal en el jardín. Dios puso ante Adán “todos los animales domésticos y [...] las criaturas voladoras de los cielos y [...] toda bestia salvaje del campo”, y una de las primeras tareas de Adán consistió en poner nombre a todos ellos. (Gé 2:19, 20.) 

Las aguas del río “que procedía de Edén” regaban el suelo de Edén. (Gé 2:10.) El hecho de que el hombre estaba desnudo permite suponer que el clima era templado y agradable. (Gé 2:25.)

Relación entre la historia del jardín del Edén del génesis Bíblico y del génesis Sumerio

Del mismo modo que sucede con la historia bíblica del Diluvio universal, y la historia de Gilgamesh de la Mitología sumeria; se pueden encontrar puntos u origen en común, o influencia con la historia bíblica de la creación del Hombre.

En la mitología Sumeria, el dios Enki creó a los seres humanos y un lugar donde el hombre podía vivir sin miedo a los animales, un lugar sin terror; pero posteriormente Enki descubrió que los humanos tenían un comportamiento inadecuado, y por ello los expulsó de este paraíso.

Sobre su existencia

Cuando en la Biblia se lo define como huerto, algunos grupos de personas y eruditos creen que se estaría aludiendo posiblemente a un lugar real, ya que también se menciona un lugar geográfico, donde habría existido (al oriente), indicando una región que se hallaría en Cercano Oriente, al este del actual Israel, situándose de este modo en algún lugar de Mesopotamia o de Arabia

Por otra parte resulta contradictorio que, estando el Edén ubicado hacia el Oriente, sea precisamente en la puerta oriental de éste donde Dios pusiese un querubín guardián, lo que alimenta las tesis de que el jardín del Edén pudiera ser una adopción semita del mito del Jardín de las Hespérides, situado al Occidente y donde un dragón de cien cabezas llamado Ladón, actúa de guardián del árbol de la inmortalidad, el robo de cuyos frutos también es considerado sacrilegio por Hera, la esposa legítima de Zeus.

DOCUMENTAL EL JARDÍN DEL EDEN